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Sfondo del paragrafo
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Algunos escritos de Obispos (al respecto):

La Voluntad de Dios es sacrificarse al Seguimiento de Jesús:

«Desde que, de hecho, el “Verbo se hizo carne” y habitó entre nosotros, sufrió por nosotros y por nosotros murió, se terminaron efectivamente los sacrificios y holocaustos, de ovejas y de toros. Ahora.. el Padre recibe solo un sacrificio de “suave olor”. Es el sacrificio che se realiza en el propio cuerpo, en el seguimiento de Cristo.. entonces dije: ”He aquí, yo he venido.. para hacer, o Dios, tu Voluntad” (Heb 10,5-7). De aquí nace y renace nuevamente la experiencia cristiana verdadera que está siempre en todo tiempo y en toda “experiencia eucarística”: se trata de vivir en todos los modos posibles el gesto de Jesús que lanza el don de su vida hasta la muerte por amor. No se sacrifican más las cosas, objetos o animales - realidades externas, finalmente - sino que se sacrifica a sí mismo, la propia libertad, el propio tiempo, las propias energías, el propio dinero, el propio cuerpo, etc., etc. Sí, en el cuerpo y no en las ideas, - en la carne y no en las vías lácteas de nuestras enrarecidas conciencias, en el cotidiano de la vida concreta y no en la abstracción de nuestros ideales - se hace la Voluntad de Dios». (ANTONIO STAGLIANÒ, Obispo, "Quien hace la Voluntad de Dios, ese es mi hermano, mi hermana y mi madre", Homilía del 27/01/2009 en: "Web Diocesi - Chiesa Cattolica").

Jóvenes, confrontase con las historias Vocacionales de la Biblia:

«Creo que es muy importante.. el corazón que escucha.. Este corazón que escucha, lo relacionaría precisamente con la escucha de la Palabra de Dios, especialmente con la escucha de la Biblia. Y en la Biblia hay historias ilustres de vocación. Invitaría a los jóvenes a confrontarse a menudo con las historias de vocación de la Biblia; comparar su historia personal con las historias vocacionales de la Biblia». (ENRIQUE DAL COVOLO, Obispo, "Discernimiento Vocacional no. 7", Año de Publicación 2012, en: www.frailespobres.net - Vimeo, min. 00:48-00:53. 01:36-02:03).

Prestar más atención a los signos de los que habla el Concilio:

«Quizás necesitemos prestar más atención a las cosas simples, a esos signos... El Concilio Vaticano II habló de signos de los tiempos, son los signos de Dios que siembra en la historia y siembra en la vida de cada uno de nosotros. Es bueno detenerse a leer estos signos, no descuidarlos, no menospreciarlos». (SEBASTIÁN SANGUINETTI, Obispo, "Discernimiento Vocacional no. 7", Año de Publicación 2012, en: www.frailespobres.net - Vimeo, min. 01:17-01:40).

Sólo cuando dirás sí, Dios te llevará.. independientemente de si se trata de la vida matrimonial o religiosa:

«Lo primero que debes hacer es decir "Sí" a Dios, lo que sea que Él te esté pidiendo; no es importante ahora entender si él te pide el Sacerdocio, la Vida Religiosa o la Vida Matrimonial, di "Sí", y solo cuando dirás "Sí", entonces Dios te llevará al siguiente paso; y el siguiente paso es discernir». (SAM JACOBS, Obispo, "Discernimiento Vocacional no. 7", Año de Publicación 2012, en: www.frailespobres.net - Vimeo, min. 02:00-02:15).

Sólo cuenta lo que el Señor quiere, el resto es secundario:

«El Señor es el Bien Supremo, todo lo demás es secundario, todo lo demás se va, nada permanece. "Verbum Domini manent in eternum", esto es lo que dice la Escritura: sólo la Palabra de Dios permanece para siempre, nadie la quita; las otras cosas se desgastan, se deterioran». (JOSÉ AGUSTÍN, Obispo, "Discernimiento Vocacional no. 7", Año de Publicación 2012, en: www.frailespobres.net - Vimeo, min. 01:14-01:38).

No tengan miedo, seguir al Señor es una Gracia:

«No tengan miedo, Cristo solo les hará bien, Él nunca les hará daño, seguirLo es una Gracia, no un mal». (EMERY KABONGO, Obispo, "Discernimiento Vocacional no. 7", Año de Publicación 2012, en: www.frailespobres.net - Vimeo, min. 01:46-01:59).

Apertura a la disponibilidad para hacer Su Voluntad:

«En el Evangelio.. la pregunta dirigida al Bautista: "¿Qué debemos hacer?". Esta no es una solicitud que se da por sentada. Y debemos admitir que no es en absoluto frecuente en los labios de los cristianos. Tal pregunta atestigua de hecho una apertura a Dios, una disponibilidad para hacer su voluntad, incluso si esto implica cambios en las elecciones, estilos y hábitos» (CONRADO MELIS, Obispo, Homilía en: Filesusr, "Apertura de la Puerta Santa", Domingo, 13 de diciembre de 2015).

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