La Vida Sacramental es indispensable para comprender seriamente la Voluntad de Dios:
La necesidad de la vida sacramental:
«Pero, a fin de que la caridad crezca en el alma como una buena semilla y fructifique, todo fiel debe escuchar de buena gana la palabra de Dios y poner por obra su voluntad con la ayuda de la gracia. Participar frecuentemente en los sacramentos, sobre todo en la Eucaristía, y en las funciones sagradas. Aplicarse asiduamente a la oración, a la abnegación de sí mismo, al solícito servicio de los hermanos y al ejercicio de todas las virtudes. Pues la caridad, como vínculo de perfección y plenitud de la ley (cf. Col 3,14; Rom 13,10), rige todos los medios de santificación, los informa y los conduce a su fin. De ahí que la caridad para con Dios y para con el prójimo sea el signo distintivo del verdadero discípulo de Cristo». (CONCILIO VATICANO II, Constitución Dogmática "Lumen Gentium", no. 42).
Vida Sacramental, sin la cual no se puede entender bien la Voluntad de Dios:
«La Vida Sacramental, es decir, Confesarse a menudo a través de un Sacerdote y a menudo Comunicarse con Jesús en la Eucaristía, es fundamental en un camino serio de discernimiento de la Voluntad de Dios para nosotros, de lo contrario, ¿Cómo puedes pretender entender bien la Voluntad de Dios para ti? Jesús dijo claramente a los Apóstoles y, por lo tanto, a los Obispos y sus delegados: “A quienes les perdonen los pecados les quedarán perdonados; a quienes se los retengan les quedarán retenidos” (Jn 20,23), así que si no vas a los obispos o a sus sacerdotes delegados para confesar tus pecados, los pecados permanecen contigo y no podrás acceder a la gracia de Dios para entender bien la voluntad de Dios, lo que equivaldría a tener un coche con las ventanillas delanteras sucias – dijo un hermanito – pero no verías nada del camino por recorrer, corriendo así un serio peligro constante en lugar de entender la voluntad de Dios. Del mismo modo, si no comieras al menos semanalmente la Eucaristía, es decir, el Cuerpo de Jesús, sería equivalente a salvar a un niño de las aguas profundas y ponerlo en el barco y luego no alimentarlo más, es decir, ¿no moriría? Por eso Jesús también dijo claramente: “si no comen la carne y beben la sangre del Hijo del Hombre (es decir, mi Sagrada Comunión), no tendrán vida en ustedes” (Cfr. Jn 6,53-54), y por tanto, ¿Cómo se puede buscar la voluntad de Dios sin vida en nosotros, si estamos muertos? Por lo tanto, buena continuación en la Vida Sacramental en ustedes, para quien ya lo hiciera, y para los que no lo hiciera, entonces: “Conviértanse y crean en la Buena Noticia” (Mc 1,15) - dice Jesús - y entonces recibirán la Gracia para entender seriamente la Voluntad de Dios, ya que Jesús mismo también dijo: “Si ustedes permanecen en mí y mis Palabras permanecen en ustedes, pidan lo que quieran y lo obtendrán”. (Cfr. Jn 15,7). Al buen entendedor pocas palabras». (Padre Volantino Verde)
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la importancia la importancia de la Vida Sacramental
para comprender seriamente la Voluntad de Dios.)
- (Cfr. Concilio Vaticano II, "Lumen Gentium", nn. 11.22)
- (Cfr. Concilio Vaticano II, "Presbiterorum Ordinis", no. 2)